"El Molino": más de cien años de historia de una creciente y pujante zona de la ciudad

DESDE EL AYER, EL SECTOR SE PROYECTA  HACIA EL FUTURO

Los orígenes de un barrio que comenzó a desarrollarse desde fines del siglo XIX.


Junín fue, en los inicios del siglo XX, una típica ciudad ferroviaria debido a que en 1885 llegaron dos empresas ferroviarias: el Central Argentino y el Buenos Aires al Pacífico.
La llegada del FCBAP a Junín fue determinante porque además del importante tráfico de cargas y pasajeros instaló, en 1886, los talleres ferroviarios.
De esta manera, el ferrocarril fue decisivo para la transformación urbanística y demográfica de la ciudad, ya que la inmigración, principalmente italiana y española, comenzó a llegar motivada por la oferta laboral que brindaban los talleres ferroviarios.
Debido a ello, se produjo en las primeras décadas del siglo XX, el desborde de los espacios ocupados por la población, comenzando la demanda de nuevas tierras y la aparición de distintos barrios.
Con respecto al barrio “El Molino”, además de los ferrocarriles, fue muy importante allí la radicación, en 1896, de un pequeño molino harinero de piedra, accionado a vapor. Precisamente este sector, al ser cuna de la industria molinera de la ciudad, el rubro se vio potenciado con el crecimiento de la empresa montada por los hermanos Fortunato y Ernesto Tassara.
Si bien los comienzos del molino fueron difíciles, su funcionamiento fue incesante, marcado por la expansión del personal y la ampliación de las instalaciones. La proximidad del molino con las vías de ambos ferrocarriles le permitió el transporte de la materia prima y de los productos elaborados a través de ramales secundarios desde el establecimiento fabril o depósitos hacia la vía principal.
Con el paso del tiempo, en sucesivas modificaciones y con la incorporación constante de nuevas tecnologías y maquinarias, esta empresa se convirtió en una de las más importantes de nuestra ciudad, con un extenso mercado interno e internacional.
De esta manera, los depósitos, silos y el establecimiento fabril del Molino Tassara conformaron los elementos urbanos más destacados y emblemáticos de los cuales el barrio recibió el nombre.
Dentro de la planta urbana del entonces pueblo de Junín, y en el microespacio estudiado, con la subdivisión en manzanas y lotes, comenzó la venta de terrenos para la instalación de los primeros pobladores, en su gran mayoría ferroviarios. Muchos de ellos deseosos de afincarse, fueron construyendo sus viviendas con ahorros y trabajo personal, otros con los créditos que ofrecía el Hogar Ferroviario.
Entre los pobladores de este barrio encontramos a dos destacados juninenses: Delio Destéfani, periodista, escritor, compositor, autor musical, deportista, directivo de fútbol y concejal y a Luis B. Negreti, un poeta compañero de músicos y compositor de letras de tango.


Comentarios


Entrevista en Clubber FM con Matías Canzonetta

Entrevista en Contacto Directo: Historia, circuito turístico del Fuerte, tecnología y el periodismo

LO MAS LEIDO

Los colores de Junín en la última década del siglo 19: La IA le da tonos y matices al blanco y negro de imágenes de 1890 a 1899

Patrimonio histórico y cultural

Personajes de la ciudad

Cuántos papas pasaron desde la fundación de Junín hasta la actualidad

Las lecciones de Malvinas desde el punto de vista de la logística

FORTINES DEL PARTIDO DE JUNIN

Grupo de Artillería 7 sucesor del Grupo de Artillería 121

Por los pasos del Fuerte Federación

La misteriosa casa de calle Tejedor: Cuna de mitos e historias y hasta de un cortometraje

DECADA DE 1970