La ciudad se ha visto afectada por varias tormentas de lluvia y viento -mucho menos que otras localidades de la región, algunos dicen que debido a que se encuentra en una zona baja- de mayor o menor intensidad que trajeron aparejadas cortes de luz, caídas de ramas, árboles y los inconvenientes lógicos que toda tormenta de alguna intensidad trae en una ciudad. El lunes 2 de diciembre de 2013, después de una jornada donde la temperatura máxima llegó a los 36 grados 2 décimas, se abatió sobre la ciudad una feroz tormenta de lluvia y vientos con ráfagas que superaron los cien kilómetros por hora. Y eso fue suficiente para se produjeran por ráfagas de 100 a 130 kilómetros por hora -según la zona-, provocando la caída de más de cien árboles sin contar ramas además de entre 70 y 90 postes de luz y teléfonos. Hubo unas siete voladuras de techos y árboles caídos en viviendas precarias generando que esas familias fueran autoevacuadas. Esto demandó el trabajo de personal de Defensa Civil, ...