Con motivo de cumplirse el 25 de diciembre de 2011 el primer aniversario del fallecimiento doctor Pablo Bava Bussalino (foto), uno de sus hijos, Juan Pablo, quien reside en La Plata, me hizo llegar vía facebook el siguiente texto, que junto a otros, estaban siendo recopilados para un futuro libro de historias que su padre estaba escribiendo y era su intención terminar, pero, desgraciadamente, no pudo hacerlo.
Agradezco profundamente a Juan Pablo por la amabilidad que tuvo de acercarmelo y a manera de homenaje, muy humilde por cierto porque considero que el doctor Pablo Bava Bussalino es merecedor de un mucho mayor reconocimiento de parte de la ciudad que tanto amó, que el que yo pueda tributarle desde este sencillo blog, quiero compartir con mis amigos lectores el siguiente texto:
El texto del doctor Bava Bussalino sobre El Fortín de las Morochas es el siguiente:
EL FORTÍN DE LAS MOROCHAS
Son días de gloria para una institución que ha transitado sin prisa y sin pausa por todas las divisiones del baloncesto juninense hasta alcanzar logros impensados: el ascenso a la primera divisional “A” por segunda vez en su historial.
Curiosamente, los dos clubes mas importantes de la ciudad en materia de básquet en los tiempos que corren tienen sus antecedentes remotos en obvias alusiones al ciclismo, de algún modo y manera, como diría Borocotó: “el deporte de los pobres”.
En efecto, uno se denominó Club Ciclista Juninense y el otro “Pedal y fibra”, en el que como sus nombres lo indican predominaban el ciclismo, hasta que mas tarde este fue reemplazado por una entidad llamada “Imperio Británico”, que tenía su sede en la calle que llevaba su mismo nombre y que hoy se denomina Malvinas Argentinas. Esta era una institución en la que la mayoría de sus socios querían seguir exclusivamente participando en los torneos de fútbol y no aceptaban el crecimiento del básquet, cosa que hizo se produjera una escisión el día 1 de octubre de 1935 y en la casa del peluquero del barrio “Las morochas”- zona roja en aquella época-, Don Enrique Bocassi finalmente apareció el club Argentino de Junín.
La primera tarea de la flamante comisión, encabezada por el propio Bocassi, e integrada por Raúl Donato, José Petraglia, José de la Sota, José Bondonno y Horacio Fernández, entre otros, era la de encontrar un lugar adecuado para la práctica del básquet.
Ya en el año 1938 se pudo inaugurar la tan ansiada cancha de básquet y por la cual habían estado denodadamente luchando durante largo tiempo. La misma no era un terreno propio, sino que se alquilaba, situación que duró hasta el año 1941, cuando se compraron 3 lotes en Alsina y Almirante Brown. En 1950 se inauguró oficialmente la cancha en un partido contra el club Ciclista Juninense. En el año 1958 se consagró el equipo “turco”- denominación que obedece a que en el barrio existía una fuerte radicación de la colectividad árabe- por primera vez campeón local y en 1960 obtuvo el lauro mayor consagrándose campeón del torneo provincial en Bahía Blanca, mas precisamente en Punta Alta.
El grupo de la hazaña estuvo integrado entre otros por Rubén «Toti» Garro y Adolfo De Rorre, el presidente de aquella época, José Bondonno- hoy fallecido- además de Eduardo Dimarco, Aldo Calderone, Héctor Abdala, Natalio Nigro que fueron en calidad de directivos
También viajaron con el plantel dos personas más que allegadas a la institución “turca”, como «Chocho» Caligiuri y Orlando Tablada, el masajista - e inolvidable futbolista y gran amigo del plantel-.
Los jugadores fueron «Beto» Vignolo, Raúl Scala, «Toto» Petraglia (capitán), «Cacho» Quintanal, Angel Chemile, Guillermo Del Soldatto, «Mancho» Curá, «Pelusa» Quintanal, «Matrero» D´Anunzio y Carlos Barbagallo, bajo la batuta de Héctor «Coco» Nigro como D.T.
Incluso, el actual estadio- y desde hace algunos años- lleva el nombre de uno de los históricos jugadores que realizaron aquella gesta: Héctor “Matrero” D´anunzio
Imposible escribir sobre la institución del barrio de “las morochas” y no mencionar a dos emblemas y señores como es el caso de los hermanos Enrique y Roberto Biurrun, ejemplos de conducta, entrega y calidad durante muchísimos años.
El espíritu de lucha, la garra, y la fibra han sido siempre las banderas distintivas de sus equipos, que desde la nobleza vienen recorriendo un largo camino...
(N de la R.: El doctor Pablo Bava Bussalino fue intendente de Junín, político, convencional constituyente de 1994, historiador, abogado y escritor. También ejerció el periodismo escribiendo en el desaparecido diario "El argentino" de La Plata, y habiendo sido fundador de la revista estudiantil "Diálogo" de la misma ciudad, en tiempos que presidía la Federación de Estudiantes Libres. Se desempeñó como jefe de Deportes en el Diario "Democracia" de Junín y fue activo colaborador y editorialista del Diario "La Verdad" y por sobre todo, un amante de esta nuestra querida ciudad de Junín.
Agradezco profundamente a Juan Pablo por la amabilidad que tuvo de acercarmelo y a manera de homenaje, muy humilde por cierto porque considero que el doctor Pablo Bava Bussalino es merecedor de un mucho mayor reconocimiento de parte de la ciudad que tanto amó, que el que yo pueda tributarle desde este sencillo blog, quiero compartir con mis amigos lectores el siguiente texto:
El texto del doctor Bava Bussalino sobre El Fortín de las Morochas es el siguiente:
EL FORTÍN DE LAS MOROCHAS
Son días de gloria para una institución que ha transitado sin prisa y sin pausa por todas las divisiones del baloncesto juninense hasta alcanzar logros impensados: el ascenso a la primera divisional “A” por segunda vez en su historial.
Curiosamente, los dos clubes mas importantes de la ciudad en materia de básquet en los tiempos que corren tienen sus antecedentes remotos en obvias alusiones al ciclismo, de algún modo y manera, como diría Borocotó: “el deporte de los pobres”.
En efecto, uno se denominó Club Ciclista Juninense y el otro “Pedal y fibra”, en el que como sus nombres lo indican predominaban el ciclismo, hasta que mas tarde este fue reemplazado por una entidad llamada “Imperio Británico”, que tenía su sede en la calle que llevaba su mismo nombre y que hoy se denomina Malvinas Argentinas. Esta era una institución en la que la mayoría de sus socios querían seguir exclusivamente participando en los torneos de fútbol y no aceptaban el crecimiento del básquet, cosa que hizo se produjera una escisión el día 1 de octubre de 1935 y en la casa del peluquero del barrio “Las morochas”- zona roja en aquella época-, Don Enrique Bocassi finalmente apareció el club Argentino de Junín.
La primera tarea de la flamante comisión, encabezada por el propio Bocassi, e integrada por Raúl Donato, José Petraglia, José de la Sota, José Bondonno y Horacio Fernández, entre otros, era la de encontrar un lugar adecuado para la práctica del básquet.
Ya en el año 1938 se pudo inaugurar la tan ansiada cancha de básquet y por la cual habían estado denodadamente luchando durante largo tiempo. La misma no era un terreno propio, sino que se alquilaba, situación que duró hasta el año 1941, cuando se compraron 3 lotes en Alsina y Almirante Brown. En 1950 se inauguró oficialmente la cancha en un partido contra el club Ciclista Juninense. En el año 1958 se consagró el equipo “turco”- denominación que obedece a que en el barrio existía una fuerte radicación de la colectividad árabe- por primera vez campeón local y en 1960 obtuvo el lauro mayor consagrándose campeón del torneo provincial en Bahía Blanca, mas precisamente en Punta Alta.
El grupo de la hazaña estuvo integrado entre otros por Rubén «Toti» Garro y Adolfo De Rorre, el presidente de aquella época, José Bondonno- hoy fallecido- además de Eduardo Dimarco, Aldo Calderone, Héctor Abdala, Natalio Nigro que fueron en calidad de directivos
También viajaron con el plantel dos personas más que allegadas a la institución “turca”, como «Chocho» Caligiuri y Orlando Tablada, el masajista - e inolvidable futbolista y gran amigo del plantel-.
Los jugadores fueron «Beto» Vignolo, Raúl Scala, «Toto» Petraglia (capitán), «Cacho» Quintanal, Angel Chemile, Guillermo Del Soldatto, «Mancho» Curá, «Pelusa» Quintanal, «Matrero» D´Anunzio y Carlos Barbagallo, bajo la batuta de Héctor «Coco» Nigro como D.T.
Incluso, el actual estadio- y desde hace algunos años- lleva el nombre de uno de los históricos jugadores que realizaron aquella gesta: Héctor “Matrero” D´anunzio
Imposible escribir sobre la institución del barrio de “las morochas” y no mencionar a dos emblemas y señores como es el caso de los hermanos Enrique y Roberto Biurrun, ejemplos de conducta, entrega y calidad durante muchísimos años.
El espíritu de lucha, la garra, y la fibra han sido siempre las banderas distintivas de sus equipos, que desde la nobleza vienen recorriendo un largo camino...
(N de la R.: El doctor Pablo Bava Bussalino fue intendente de Junín, político, convencional constituyente de 1994, historiador, abogado y escritor. También ejerció el periodismo escribiendo en el desaparecido diario "El argentino" de La Plata, y habiendo sido fundador de la revista estudiantil "Diálogo" de la misma ciudad, en tiempos que presidía la Federación de Estudiantes Libres. Se desempeñó como jefe de Deportes en el Diario "Democracia" de Junín y fue activo colaborador y editorialista del Diario "La Verdad" y por sobre todo, un amante de esta nuestra querida ciudad de Junín.
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