En la misma el ingeniero Teodoro Schuster responde: "Coronel Escribano siendo designado relevo del mismo el coronel Federico Rauch, desde el Ministerio de Guerra, se informa: "Hallándose ya pronto a marchar para el Fuerte Federación el Coronel Don Federico Rauch, el señor Inspector General dará sus órdenes para que se le entregue el mando de su Regimiento e instrucciones que debe llevar".
Con alusión al pedido hecho por Escribano el día 27 de febrero y al de Ramírez del día 29 del mes anterior de 1828, con fecha 4 de marzo se solicita al ingeniero que trazara el Fuerte: "Informe el ingeniero Teodoro Schuster dando las explicaciones que se requieren, por el decreto marginal que antecede, del Inspector General Rauch"
En la misma fecha, el ingeniero Teodoro Schuster responde: "Señor Coronel: El que suscribe expone que las piezas que existen en la Guardia de la Federación son las siguientes:
2 piezas de a 8 con cureña de plaza; estas piezas no tienen ni rosca, ni cuña y las cureñas no corresponden tampoco a las piezas, más llegaron últimamente con las maderas de Buenos Aires a la Federación.
1 pieza de a 4 con cureña de batalla.
2 piezas de a 2 con cureña de batalla.
Se han distribuido estas piezas del siguiente modo: en los dos baluartes del frente del Fuerte en cada una una pieza de a 8.
En la flecha de la retaguardia la de a 4 y en las dos flechas laterales, en cada una, una pieza de a 2.
Las explanadas deben ser construidas que se puedan guiar las piezas a todos lados.
Estos datos serán suficientes para que el Sr. Comandante del Parque pueda calcular en tamaño, lo cual no es de mi resorte. Buenos Aires, Marzo 4 / 1828. T. Schuster".
El Sr. Gaspar Chacón, Juez de Paz de San Pedro, con igual fecha, notifica al Gobierno que "no se encuentran allí carretas para conducir al Fuerte de la Federación algunos útiles que se hallan acopiados", cuyo detalle acompaña según la siguiente referencia: "150 cumbreras y horcones, 3.000 latas, 1.000 tijeras".
Por el Ministerio de Guerra, el 5 de marzo se establece: "El Gobierno ha dispuesto con esa fecha que el Coronel don Federico Rauch se encargue en oportunidad de visitar en inspección los trabajos del Fuerte 25 de Mayo, adoptar las medidas de comunicación entre dicho Fuerte y el de la Federación. Lo que se comunica al señor Inspector para que lo haga saber al referido Coronel Rauch y Sargento Mayor Pedriel".
Por el mismo conducto se cursa una nota informando al Mayor Benito Correa, agregado al Regimiento 4 de Milicias, que "se presente sin excusa para ser empleado en el servicio que corresponde".
Continúa el asunto Pericón. Por nota fechada el día 5 de marzo de 1828, se dirigen al Inspector General, de acuerdo a orden superior: "...elevado el expediente formado por la reclamación hecha por el Jefe Comandante del Fuerte de la Federación, sobre los salarios que se adeudan a los prisioneros de guerra que trabajan en dicha obra cuyo reclamo fue elevado por el Inspector General, con fecha 27 del pasado".
El 7 de marzo hay una comunicación -un poco confusa- con respecto a este asunto: "La Contaduría dice que el decreto Nro. 25 que ha presentado Perichón que es el pagamento general y único de nuestros peones comprendida desde el día 7 de enero hasta el 26 del mismo mes, y que en otro documento están comprendidos los 30 peones reclamantes y el carpintero don José Domingo Silva, sin que pueda dudarse de la legalidad de este pago respecto a que la lista aparece firmada por el oficial de la Comisaría Don Juan A. Peregrina, intervenida por Perichón y con V° B° del Comandante Escribano".
LOS DESERTORES PRISIONEROS DEL FEDERACION
El 10 de marzo, con referencia a un pedido elevado anteriormente sobre la necesidad de brazos para proseguir las obras en el Fuerte, Rondeau a los efectos de poder disponer de algunos hombres para ser enviados al citado lugar, eleva al Ministro de Guerra, una relación de los soldados desertores que han sido hecho prisioneros y tomados de leva, que se hallan en la isla Martín García en calidad de detenidos.
Es un total de 22 hombres, entre los cuales existen ocho portugueses.
Rauch, en extensa nota fechada el mismo día, se dirige a la superioridad relatando las andanzas de "Juan Hidalgo, nativo de esta Guardia y cautivo entre los indios. La llegada a nuestra frontera con el pretexto de ver si puede reunir algún dinero para rescatar a su madre que también se halla cautiva, con esta suposición y natural viveza, ha logrado sorprender sin duda a las autoridades".
Desde luego que, las sospechas recaídas sobre Hidalgo, indicaban que era un espía de los indios, con los cuales había convivido desde su niñez y no se creía que pudiera perder sus hábitos y costumbres.
(Fuente: Junín, Fundación y Gobierno, de Jorge Guillermo Howden)
ADHIEREN AL CICLO HISTORIAS FUNDACIONALES HACIA LOS 195 AÑOS DE JUNIN 
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